Una práctica común por la cual una empresa lo evalúa como cliente antes de emprender un negocio. Esto se hace para mitigar los riesgos de fraude, lavado de dinero u otros delitos.
Una práctica común por la cual una empresa lo evalúa como cliente antes de emprender un negocio. Esto se hace para mitigar los riesgos de fraude, lavado de dinero u otros delitos.